Una ventana abierta a la naturaleza a través de los ojos de lo me apasiona: las Aves.

miércoles, 31 de julio de 2019

CHARRANES BAJO LA LLUVIA

De regreso en casa después de unos días por Cantabria donde, además de descansar, ha habido algún rato de pajareo que me ha hecho recorrer parajes ya conocidos como la ría de San Vicente de la Barquera con otros recientemente conocidos como Vuelta Ostrera, en Suances.

Uno de los días buscamos un plan que nos resguardarse de la lluvia que caía en toda la franja costera y decidimos ir a Santander. Nada más pensar el plan  me vinieron a la mente dos golondrinas de mar. Son especies habituales en las costas de la Península pero para alguien de interior, como yo, siempre es una alegría ver a estos dos pescadores implacables que se lanzan en picado a por los despistados peces que nadan bajo ellos. Para verlos un buen sitio es el entorno del Museo del Cantábrico (muy recomendable).

Y allí, volando bajo la lluvia estaba un grupito de Charranes Comunes (Sterna hirundo) que se movía, muy cerca del paseo, entre el puerto y una plataforma donde se posaban para descansar de su afanada mañana. Los adultos lucen un rojo intenso en pico y patas de  así como una caperuza negra. Se trata de una especie reproductora, en puntos determinados,  en nuestro territorio que en unos días o semanas iniciará su viaje pasado el verano hacia sus zonas de invernada en las costas de Mauritania o Ghana. Mientras tantos pudimos disfrutar de su vuelo en la capital cántabra.

Charranes Comunes (Sterna hirundo)

Charranes Comunes (Sterna hirundo)

Charranes Comunes (Sterna hirundo)

Charranes Comunes (Sterna hirundo)

Charranes Comunes (Sterna hirundo)

Charranes Comunes (Sterna hirundo)

Charranes Comunes (Sterna hirundo)


Desde el mismo sitio pudimos disfrutar otro de los charranes habituales en la Península, donde también cría en sitios puntuales para hacerse más común en los pasos. Algo más grande que el común, en el Charrán Patinegro (Sterna sandvicensis), destaca su cabeza con caperuza negra terminada en una cresta además de sus patas  y pico negro, estando este último terminado en una punta amarilla. Es sorprendente verlos lanzarse al agua desde una altura considerable en busca de peces con que alimentarse.

Charrán Patinegro (Sterna sandvicensis)

Charrán Patinegro (Sterna sandvicensis)

Charrán Patinegro (Sterna sandvicensis)

Charrán Patinegro (Sterna sandvicensis)

Charrán Patinegro (Sterna sandvicensis)

Charrán Patinegro (Sterna sandvicensis)

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jueves, 18 de julio de 2019

PROSPECTANDO LOS TRONCOS

Un par de salidas por un par de bosques me han hecho disfrutar mucho de los pajarillos forestales que usan los troncos y las copas de los árboles para sacar adelante a sus pequeñines. Uno de los bosques, el de la ribera del Adaja,  es un habitual en mis paseos mientras que para el otro, el Pinar de Hoyocasero, ha sido mi primera visita.

En ambos pude ver muchos de los paseriformes de nuestros bosques como los Mosquiteros Papialbos (Phylloscopus Bonelli), los Pinzones Vulgares (Fringilla coelebs), Verdecillos Común (Serinus serinus) o Mirlos Comunes (Turdus merula)

Pero a pesar de ser ambos un bosque existen especies propias de cada uno de ellos que en el otro no aparecen tan fácilmente como el Abejero Europeo (Pernis aviporus), el Alcotán Europeo (Falco subbuteo) o el Herrerillo Capuchino (Lophophanes cristatus) en el precioso Pinar de Hoyocasero (lugar de especial interés botánico); y los dos protagonistas de la entrada anterior, al Ruiseñor Común (Luscinia megarhynchos) o la Curruca Mosquitera (Sylvia borin) en las orillas del Adaja.

En ambos sitios pudimos disfrutar de dos especies tan bonitas como peculiares. Ambas son grandes escaladores de troncos, que recorren cada una a su manera. El críptico Agateador Europeo (Certhia brachydactyla) de tonos grisáceos, pico largo y fino recorre los árboles desde abajo hacía arriba ascendiendo en círculos por la corteza de los árboles. El precioso, de tonos azules, Trepador Azul (Sitta europeae) puede recorrer los troncos tanto de abajo a arriba como en sentido contario emitiendo su reconocible canto. A ambos los pude retratar en una de mis visitas a la ribera del Adaja y os dejo con ellos.


Agateador Europeo (Certhia brachydactyla)

Agateador Europeo (Certhia brachydactyla)

Agateador Europeo (Certhia brachydactyla)

Agateador Europeo (Certhia brachydactyla)

Agateador Europeo (Certhia brachydactyla)

Agateador Europeo (Certhia brachydactyla)

Trepador Azul (Sitta europeae)

Trepador Azul (Sitta europeae)

Trepador Azul (Sitta europeae)

Trepador Azul (Sitta europeae)

Trepador Azul (Sitta europeae)
Trepador Azul (Sitta europeae)

Trepador Azul (Sitta europeae)

Trepador Azul (Sitta europeae)

Trepador Azul (Sitta europeae)
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lunes, 15 de julio de 2019

TARDE DE MARTINE(TE)S

Paseo vespertino el de pasado jueves, en compañía de Elia, por las orillas del río Adaja en el entorno de la capital con la idea de disfrutar de los pajarillos que por allí se mueven. Me apetecía ver si por allí seguía alguno de los Martinetes (Nycticorax nycticorax) que por esta fechas acuden fieles a un rincón de "nuestro" río. 

En un primer intento a la zona donde, al amanecer o al atardecer, se muestra esta rechoncha garza, no pude verla. Pero por el contrario me llevé una gran alegría. Hacía ya un tiempo que no veía perchado en las ramas que atraviesan la bóveda de árboles al Martín Pescador atento a cualquier movimiento en la superficie del agua para lanzarse, cual flecha de color azul, a por el desprevenido pececillo que se ponga a tiro. Ayer volví a verlo en esta zona, habitual hasta no hace mucho, nervioso, de rama en rama o volando aguas arriba. Pude verlo sobre la rama un par de veces y, aunque algo lejos, dejo constancia de ello con estas fotos.





Ya de vuelta del paseo, con parada obligatoria en los columpios, y tras ver gran variedad de los pajarillos que viven en este rincón del río nueva parada en la zona donde los martinetes salen cuando el día va decayendo. Y no hubo que buscar nada pues allí estaba un bonito ejemplar  de la más crepuscular de las ardeidas. Se mantuvo largo rato antes de volar río arriba.





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martes, 9 de julio de 2019

CON LOS ELEONORA SI QUE SE CUMPLIÓ

El otro día os contaba que el refrán que dice que a la tercera suele ser la vencida no se cumplió con la Agachadiza Común, pero para compensar ese mismo refrán si que he valido con una de las más singulares rapaces de las que podemos ver por nuestra tierra.

Cuando llega el solsticio de verano con los días más largos, y la práctica totalidad de las aves sacan adelante a sus crías, un preciosos falcónido llega a nuestros pinares a alimentarse de los escarabajos que emergen en esta época antes de proseguir su viaje de migración (si, habéis leído bien). Aunque el paso prenupcial ya ha terminado el Halcón de Eleonor (Falco eleonorae) está ahora en pleno viaje desde zonas tan lejanas como Madagascar hacia sus zonas de cría, en los acantilados de las costas e islas del Mediterráneo, haciendo parada en algunos pinares nuestra Comunidad para reponer fuerzas. Y esta fenología tan especial es así porque esta especie retrasa su época de cría para hacerla coincidir con el paso de miles de pajarillos en el paso postnupcial.

Este año había hecho dos intentos de verlos en un pinar cercano a mi pueblo sin suerte. Aún así no cejé en mi empeño y gracias a un par amigos y paisanos (Fito y Fredy, muchas gracias) hice un nuevo intento este sábado pasado. Esa tarde pude ver dos ejemplares en el entorno de unos árboles secos (por los que tiene predilección) de manera muy fugaz así que, el domingo bien temprano, estaba de nuevo en el pinar y esta vez si, pude ver 3 ejemplares de los que dos se dejaron ver muy cerca (desde el coche o a una distancia respetuosa) y durante largo rato. Disfrutad de ellos vosotros.












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miércoles, 3 de julio de 2019

A LA TERCERA NO FUE LA VENCIDA

Esta vez el refrán no ha podido cumplirse y al tercer intento no ha habido suerte con la Agachadiza Común (Gallinago gallinago). El que si que se cumplió fue el de que no hay dos sin tres y, tras dos intentos en la Paramera y la Lancha, el domingo pasado Juanra hicimos un nuevo intento con el que lograr ver el vuelo de la "cabrilla". Para ello fuimos a uno de sus zonas habituales de cría, los prados de la vega alta del Alberche, en las cercanías de San Martín de la Vega del Alberche. Días antes, César San Segundo la había visto en este valle, y es una de las mejores zonas para verla en esta época pero este año los prados encharcados que necesita están prácticamente secos y eso lo ha notado la especie. Tras recorrer varios prados y el cauce del río nos fuimos sin poder disfrutar de ella.

Pero si que pudimos ver muchas especies que comparten el lugar con la más buscada de estas semanas. Entre  las rapaces destacó una. Tras ver varios Milanos Negros, alguna Águila Calzada y un grupo de Buitres Leonados, cuando ya dejábamos el valle pudimos ver una silueta grande, de potente cabeza y de tonos muy claros. Allí, sobre una torre pudimos ver dos Culebreras Europeas (Circaetus gallicus) a placer y ahora vamos a disfrutar de la que más cerca estaba.

Culebrera Europea (Circaetus gallicus)

Culebrera Europea (Circaetus gallicus)

Culebrera Europea (Circaetus gallicus)

Culebrera Europea (Circaetus gallicus)

Uno de los sitios donde más buscamos a la Agachadiza fueron los postes y cables del tendido eléctrico que recorre el valle pues con frecuencia se las ve posadas en ellos (les gusta ponerse en el elemento más alto del lugar). Palo a palo  y metro a metro pudimos ver algunas especies pero la más buscada no apareció. En dos puntos pudimos ver al esquivo Cuco (Cuculus canorus) acompañado por algunos  Trigueros y una ruidosa y territorial Curruca Zarcera (Sylvia communis)  que cantaba ante nuestra presencia.

Curruca Zarcera (Sylvia communis)

Curruca Zarcera (Sylvia communis)

Curruca Zarcera (Sylvia communis)

Mientras prospectábamos la hierba de los prados que acompañan a las aguas nacidas unos kilómetros más arriba pudimos ver varias especies, pero no la del pico largo. Abundantísimas eran las Lavanderas Boyeras (Motacilla flava iberiae), entre las que había un buen número de jóvenes. También vimos alguna Lavandera Blanca, escuchamos el chasquido de la Tarabilla Común y sobre las rocas se movían las Collalbas Grises (Oenanthe oenanthe).

Sobre esos prados, cerca del cauce del Alberche volaban grupos de Aviones Comunes y Zapadores, Golondrinas Comunes y Vencejos Comunes. Y en las aguas de una de las arterias de la provincia abulense pudimos descubrir  3 Andarríos Grandes (a falta de un limi al menos vimos otro).

Collalba Gris (Oenanthe oenanthe)

Collalba Gris (Oenanthe oenanthe)
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