Llevaba un tiempo detrás de ella, desde que Nayib me avisó que la había visto en el río Adaja a su paso por El Fresno (mi nuevo destino de trabajo) pero no lograba verla. Ha sido esta semana cuando, al pasar por una de las pocas pozas que mantienen buen nivel de agua del cauce de Adaja, a su paso por Niharra, la vi. Un precioso ejemplar de Garceta Grande se alimentaba en este remanso de tranquilidad.
Esta garza de gran tamaño, similar a la Real, con plumaje totalmente blanco, como la Garceta Común, y pico amarillo, como la Bueyera, ha pasado de ser escasa y puntual en los inviernos y pasos de la Península, a ser reproductora en algunos puntos y habitual en muchos mas, como en Rosarito, al sur de la provincia. Esperemos que pase el invierno por la zona y así poder disfrutar de ella.
Gracias por seguir el blog
Saludos abulenses
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