Muchas son las aves que se asocian al invierno. Una familia de éstas son los Zorzales. Dos especies están todo el año con nosotros pero es en esta época cuando aumentan su número. Además otras dos especies nos visitan cuando el frío llega a nuestras sierras. Hoy vamos a ver tres de estas especies, todas ellas pilladas en la Sierra de Ávila.
La primera es un residente de los bosques y praderas ibéricos que aumenta su número y distribución en invierno. El Zorzal Común se diferencia del resto por sus tonos marrones con el vientre blanco y el pecho amarillento-ocreáceo salpicados ambos por manchas negras en forma de flecha. Ahora se ven bandos de ellos alimentándose en los prados o en los sotos.
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Zorzal Común |
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Zorzal Común |
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Zorzal Común |
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Zorzal Común |
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Zorzal Común |
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Zorzal Común |
El segundo también es un residente, y el mayor de los zorzales de nuestras latitudes. Es el más abundante en la época de cría y ahora también aumenta su número con aves norteñas. Es más grande y estilizado que el común. Presenta un dorso pardo-grisáceo con el pecho blanco y unas manchas aleatorias, además de unas manchas negras en los flancos del pecho.
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Zorzal Charlo |
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Zorzal Charlo |
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Zorzal Charlo |
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Zorzal Charlo |
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Zorzal Charlo |
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Zorzal Charlo |
El último de los zorzales solo está presente en invierno, cuando huye del frío del norte de Europa. Es irregular, con años de más abundancia y años en que apenas se ven. Se diferencia del resto por su pequeño tamaño y los tonos rojizos de los laterales del pecho (debajo del ala) sobre un plumaje pardo-grisáceo y pecho blanco con manchas. Además tiene una bigotera y una ceja blancas muy marcadas.
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Zorzal Alirrojo (foto de archivo) |
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