Una ventana abierta a la naturaleza a través de los ojos de lo me apasiona: las Aves.

sábado, 16 de julio de 2016

UNA TARDE BIEN APROVECHADA

Voy con una de esas tardes que dan para mucho y con las que te vas muy contento a casa. La zona que visitamos Juanra y yo se sitúa al este de la capital, recorriendo en unas horas Campo Azalvaro, la Sierra de Malagon y la Sierra de Ojos Albos.

Todo empezó en Campo Azalvaro, una gran extension de praderas herbáceas situadas en un valle que comparten las provincias de Ávila y Segovia. Allí, como si de nuestro anfitriona se tratase estaba esta preciosa, y clara, Águila Culebrera oteando el horizonte con su penetrante mirada. Se mantuvo en su posadero mientras otra la sobrevolaba hacia las alturas.

Águila Culebrera

Águila Culebrera

Águila Culebrera

Águila Culebrera

De ahí, tras parada en el embalse del Voltoya donde no había gran cosa, a la Sierra de Malagon. En concreto al puerto de la Lancha en busca de un preciosos pajarillo. En los lugares con matorral y pradería volaban Verdecillos, Pardillos, Currucas Zarceras, Zarceros Políglotas o Tarabillas Comunes pero de la capa roja ni rastro. Hasta que de uno de las matorrales salió un joven de dorso rojo como antesala del espectacular adulto de Alcaudón Dorsirrojo. Me encanta verlo perchado en su rama sabiendo que en nada emprende su viaje a tierras lejanas.

Alcaudón Dorsirrojo

Alcaudón Dorsirrojo

Y de ahí a la Sierra de Ojos Albos. Donde completamos la tarde con multitud de especies. Cantaban los Escribanos Hortelanos mientras sus primos, los Montesinos mostraban su preciosa cabeza. Las Alondras Comunes cantaban al unísono de Totovías y Cogujadas Montesinas mientras en el camino las Terreras Comunes se movían nerviosas. Las Collalbas Grises y Rubias volaban de roca en roca mientras sobre ellas pasaban raudos Aviones Roquedos y Golondrinas Dauricas. Sobre las rocas controlaban el valle Buitres Leonados, Negros y un Águila Real. Pero mi cámara se centró en el bonito Roquero Rojo, del que pudimos ver un joven y una hembra con ceba en el pico.

Roquero Rojo hembra

Roquero Rojo hembra

Roquero Rojo hembra

Roquero Rojo hembra

Antes de abandonar el lugar, entre los matorrales donde cantaban varios Zarceros Políglotas pudimos ver a la más grande de las currucas, la Curruca Mirlona, con su precioso anillo ocular amarillo y esa capucha oscura. 

Curruca Mirlona

Nos despidió un bonito Alcaudón Real Meridional que desde su rama parecía decirnos " volver pronto".

Alcaudón Real

Gracias por seguir el blog
Saludos Abulenses

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