Vamos con la segunda parte del viaje a Santoña. en este caso voy a enseñaros dos de las zonas donde pude disfrutar de este paraíso del norte: el puerto de Santoña y las marismas de Bengoa, cercanas al pueblo. En ambas zonas hemos estado varias veces y aquí os mostraré lo visto en todas ellas.
La primera parada que hicimos nos llevó a la parte de atrás del polígono industrial, por cierto recomendable unas anchoítas de Santoña para recuperar fuerzas, donde esperábamos ver, junto a otras especies, una que nos habían dicho que se llevaba viendo los días antes: el Colimbo Chico. Dicho y hecho, fue para el coche y ver la silueta de uno de estos Colimbos descansando sobre el agua. Se mantuvo allí el largo rato que estuvimos y pude sacarles unas fotillos (un poco a contraluz) de esta nueva especie para mi.
Junto a él nadaban bastantes Zampullines Cuellinegros, algún Cormorán Grande y volaban Gaviotas Reidoras, Gaviotas Patiamarillas y Gaviotas Sombrías.
Colimbo Chico
Colimbo Chico
Colimbo Chico
Colimbo Chico
En esa misma zona, cuando la marea esta baja, pudimos ver lultitud de limícolas alimentándose cuando el limo está reciente. Zarapitos Reales y Zarapitos Trinadores hunden su curvo pico en el barro, lo mismo que hacían agujas Colinegras y alguna Aguja Colipinta. Les acompañan, y ya con menor tamaño, Correlimos Comunes, Correlimos Tridáctilos, Chorlitos Grises, Ostreros Euroasiáticos y Andarríos Chicos.
Zarapito Real
Zarapito Trinador
Agujas Colinegras
Agujas Colinegras
Agujas Colinegras
Correlimos Común
Correlimos Común
Correlimos Común
De ahí nos dirigimos al puerto de Santoña para ver si veíamos alguna otra especie objetivo del viaje. Y ¡Eureka!. Desde la zona de la plaza de toros (donde fui en busca, en vano, de algún Bisbita Ribereño Costero) vi un pato nadando entre algunos Cormoranes y Gaviotas. Llevé los prismáticos hacía allí y un largo pico hizo que el corazón se me pusiese a cien. Salí corriendo al puerto para poder verlo más cerca y, allí estaba un precioso ejemplar de Eider Común. Se zambullía con ese empuje de alas antes de desaparecer bajo el agua para volver a salir con alimento en el bonito y robusto pico. Otra especie que veía muy difícil de ver, y allí estaba.
Eider Común
Eider Común
Eider Común
Eider Común
Mirando al Eider estábamos cuando Eli se percató de una pequeña flecha venía hacia nosotros . Era un ejemplar de Martín pescador que se metió bajo nuestros pies en los palos del espigón del puerto. Además en las islas que había, con bajamar, descansaban Gaviotas Reidoras, Gaviotas Sombrías y Cormoranes Grandes (se me ha escapado el Gavión). También pudimos ver al Cormorán moñudo sobre un par de posaderos diferentes y un Charrán Patinegro.
Cormorán moñudo
Cormorán moñudo
Cormorán moñudo
Cormorán moñudo
Gaviota Reidora
Gaviota Sombría
Gaviotas Sombrías (la de arriba a la derecha me pareció un Gavión)
Charrán Patinegro
Cercanas al pueblo están las Marismas de Bengoa. Hay un paseo muy agradable, que a nosotros se nos hizo aun más por la compañía de Koldo (un recién iniciado en la ornitología). allí pudimos ver las diferentes especies que nadaban en la zona, entre la vegetación. Porrones Europeos y Porrones Moñudos bucean en las zonas más profundas. junto a ellos estaban algún Zampullín Chico, muchas Fochas Comunes, entre las que estaban las leucísticas que avistó Ernesto Villodas (nosinmisprimaticos) y un grupito de Ánade Friso.
No faltaron los Ánades Reales, Cercetas Comunes y algunas Gaviotas Reidoras que parecían minúsculos al lado de dos grandes Cisnes Comunes. En el camino y en los árboles del paseo vimos Mosquiteros Comunes, Verderón Común, Lavanderas blancas, Gorriones Comunes y Molineros.
Porrón europeo
Porrón moñudo
Porrón moñudo
Porrón moñudo
Zampullín Chico
Ánade Friso
Cisne Vulgar
Verderón Común
Para terminar la entrada, el día y el viaje vamos con la última especie que pudimos ver y que completó una extraordinaria experiencia. Ya a punto de irnos un punto en el centro de la bahía me hizo dirigir el telescopio hacía allí y pude distinguir la preciosa silueta, con su gran pico, del Colimbo Grande. Fue el único de este común invernante en Santoña, lo que me alegró antes de volver a Ávila.
Colimbo Grande
Colimbo Grande
Y hasta aquí el segundo día de mi primera experiencia en uno de los santuarios de nuestra geografía donde miles de aves descansan y pasan el invierno. La próxima será la última de estas entradas.
Graciaspor seguir el blog
Este próximo finde vamos nosotros...seguimos tus pasos!!!
ResponderEliminarSaludos desde León
Mucha suerte. disfrutad de ese paraíso.
Eliminarsaludos abulenses