Llega septiembre y vuelve la rutina. Dejamos atrás casi dos meses de locura, con la maleta de un lado para otro, con muchos sitios conocidos, con muchas experiencias vividas y con muchos momentos para recordar. Tengo una gran cantidad de material para ir enseñando por aquí y la primera de estas entradas se la quiero dedicar a mi gente y mi lugar favorito.
El mes de agosto tiene el nombre de dos lugares. Empieza con Íscar y los días familiares y termina con Sepúlveda donde a la familia se suman los amigos y un lugar maravilloso. Y este año Sepúlveda ha sido sinónimo de aves pues gracias al Ayuntamiento y a mi amiga Marga he podido contar lo que se sobre aves y hacer rutas o talleres para familias, niños y adultos. Y en todas ha salido el nombre de esta auténtica maravilla que ya os conté hace unos meses. Mis amigos están hartos de oírme contar la singularidad de esta joya alada de las hoces del Duratón pero para el resto de la gente del pueblo ha sido una sorpresa saber que tienen un vecino tan especial como la alondra ricotí.
Estas fotos hechas por Eneko sirven de recuerdo a los días que hemos pasado rodeados de los nuestros y a los días de pájaros vivido.
Gracias por seguir el blog
Saludos abulenses