MIS QUERIDOS VECINOS

Seguimos con el estado de alarma y en Castilla y León estamos en la fase más baja del desconfinamiento así que los movimientos tanto de adultos como de niños se circunscriben al entorno más cercano a nuestra casa. Y esto, ornitológicamente, tiene una cosa buena y mala que se solapan. Por un lado estoy conociendo a todos mis vecinos alados (que no siempre me había fijado en ellos) pero por otro los estoy conociendo tanto que se han vuelto predecibles. Aún así sigue ganando lo positivo y trato de salir varias veces por la semana (en mi hora de paseo)  a pajarear, además de los ratos que tengo con los niños (Eneko está a tope). Hoy os voy a presentar a algunos que se has saltado el confinamiento pues han cambiado de residencia durante el estado de alarma (quien pudiese tener esa libertad tan añorada).

Cuando hablamos de migración, la mayoría de la gente tiende a pensar en las planeadoras pues por su tamaño y por ser muchas de ellas rapaces llaman más la atención. Pero la migración no entiende de tamaño y realizan esos excepcionales viajes (de miles de kilómetros) aves desde la envergadura de la Culebrera Europea hasta algunos pajarillo de solo unos gramos de peso. De  ellos uno es el Mosquitero Papialbo (Phylloscopus Bonelli) , uno de los dos estivales de entre los Phylloscopus junto al ibérico. Este pequeño pajarillo de apenas 10 gramos viaja desde nuestros bosques hacía tierras africanas, al sur del Sahara, pasando por el Estrecho de Gibraltar. Solo pensar que año tras año recorren miles de kilómetros es algo increíble. Ahora llenan los encinares con su acelerado canto.

Mosquitero Papialbo (Phylloscopus Bonelli)

Mosquitero Papialbo (Phylloscopus Bonelli)

Mosquitero Papialbo (Phylloscopus Bonelli)

Mosquitero Papialbo (Phylloscopus Bonelli)

El siguiente protagonista es otro pequeñín que emite un aturullado canto en los matorrales que salpican el parque cercano a mi casa. También regresa de tierras africanas cuando la primavera tiñe nuestros campos de vivos colores. El Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta) luce unos bonitos colores amarillentos que no duda en enseñar desde las ramas más altas de las zarzas.

Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta)

Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta)

Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta)

Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta)

Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta)

Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta)

Zarcero Políglota (Hippolais polyglotta)

Una de las mayores sorpresas que me llevo cada día que salgo es corroborar que los dos territorios donde cantaban las Currucas Mirlonas Occidentales (Sylvia hortensis) el primer día sigue contando con esta especie tan bonita. Ya os conté que ver las currucas tiene lo suyo y entre ellas la mirlona, pese a ser la más grandes de las que nos visita, es una de las más complicadas. En ambos territorios he visto al macho, pero solo en el más cercano a casa he podido ver a la hembra. Me encanta ver el iris blanco entre las ramas de los árboles y arbustos donde se esconden.

Curruca Mirlona Occidental  (Sylvia hortensis)

Curruca Mirlona Occidental  (Sylvia hortensis)

Curruca Mirlona Occidental  (Sylvia hortensis)

Curruca Mirlona Occidental  (Sylvia hortensis)

Curruca Mirlona Occidental  (Sylvia hortensis)

Curruca Mirlona Occidental  (Sylvia hortensis)

Curruca Mirlona Occidental  (Sylvia hortensis)

Pero las verdaderas protagonistas de nuestras salidas de estos días son las Golondrinas Daúricas (Cecropis daurica). En algunas de las salidas las habíamos visto pasar volando cerca de nuestra casa pero llevamos unos días disfrutándolas en el entorno de un precioso encinar, e incluso hoy hemos visto 3 juntas. Cada vez que las veo me imagino que en algún lugar cercano tendrán su peculiar nido (con pasillo de entrada) que habrán construido a base de barro, agua y saliva. Nos encanta ver los tonos anaranjados de su nuca y del pálido obispillo mientras prospectan el aire en busca de insectos.

Golondrina Daúrica (Cecropis daurica)

Mucho ánimos a tod@s

Gracias por seguir el blog

Saludos Abulenses